La Comisión Europea está estudiando la adopción de una entrada universal para todos los dispositivos móviles.
Y no, no es por la comodidad de tener un mismo cargador para todo, es por las alarmantes cifras de desechos de cargadores electrónicos que hay en Europa, según los estudios de la Comisión, hay 51.000 toneladas de desechos electrónicos en el Viejo Continente, y la adopción voluntaria del cargador universal que la Comisión instó a desarrollar a los fabricantes hace ya casi una década, parece que no ha dado resultado.

Dada esta inactividad de los fabricantes, Europa está decidida a tomar medidas por el bien del planeta y también por el bien de los consumidores.